miércoles

panic atack


mis manos tiemblan como las hojas de un arbol bajo la tormenta
un corazón que se acelera
un frío que humedece mis manos

un ataque de pánico
tras otro
oscureciendome

2 comentarios:

Anónimo dijo...

pompis
no te enloquezcas,
te pienso
bonita
desde aca.
besos
miles.
j.

P dijo...

Cuento breve:

Mr. Firglebinkle me pidió que le cuide la casa hasta que regrese. Me dio un manojo de llaves y me advirtió: nunca utilices la llave dorada, nunca abras la puerta trasera. Cuando volvió, le devolví las llaves intactas.